A pocos días de acabar el año, me gustaría
hacer un pequeño resumen de mi paso por él.
Si nos vamos al comienzo, empezó siendo
un año prometedor, me sentía feliz y con muchas ganas de hacer cosas, pero
pronto se convirtió en una vana ilusión. Al poco de comenzar, empezaron los
contratiempo, sucesos contra los que no se podía hacer nada salvo aceptar y
esperar como iban avanzando los
acontecimientos. Con el paso de los meses los problemillas aumentaban y se
fueron convirtiendo en algo increíblemente duro y pesado emocionalmente
hablando. Parecía que la vida me iba poniendo prueba tras prueba, para ver si
realmente estaba preparado para seguir adelante.
No voy a dar detalles de nada, así que
lo dejare como está y se pueden hacer una pequeña idea de todo.
No todo ha sido malo, todo hay que
decirlo, por el camino me he ido encontrando con personas muy diferentes, y
algunas de ellas han conseguido entrar en mi vida por muchos sucesos vividos, y
otras simplemente han estado de paso y se quedaron atrás en este duro camino.
Estas personas me han servido de
apoyo en los duros acontecimientos del año, como ya he comentado en algún que
otro post anterior, así que no voy a dar mas detalles de ellos. Simplemente
gracias, una vez más.
Un hecho que si quiero recordar o
destacar como verdaderamente positivo, por no decir lo mejor que me ha pasado
durante este 2012, ha sido la rotura de mis cadenas que me impedían avanzar
hacia la libertad y así poder caminar por la vida de forma tranquila y mirándola
de frente sin temor a habladurías de barrios. De esto estoy muy orgullo y
contento.
Resumiendo, emocionalmente hablando,
he estado un poco desequilibrado, sin saber que hacer con mi vida, hasta que conseguí
tomar las riendas y poder controlar la situación, empezar a centrarme en mi y
dejar de lado todos aquellos problemas que no podían ser solucionados de otra
manera de la que lo fueron.
Por último, me gustaría hablaros de
un echo que ha hecho que me centre casi del todo en mí, en mirar por mí y así
poder empezar a construir mi camino de la mejor forma posible, me ha dado las
fuerzas suficiente para creer en mí y en la toda la vida que me queda por
vivir.
Rondando mi cumpleaños conocí a un
verdadero artista, una de estas personas que tienen una personalidad que te
atrapa, que te impacta y que te conquistan de tal manera que merecen admiración
total en muchos sentidos. Fue esta persona la que me hizo recordar sin querer,
que hay que quererse por encima de todo y ser fiel a todos aquellos valores que
nos vamos construyendo a lo largo de nuestra vida.
Por ser como es, ha conseguido
atravesar esa “coraza” que todos nos
creamos de alguna u otra manera. Y lo ha conseguido sin hacer nada más que ser
el mismo, una persona fiel así misma, luchadora por lo que quiere, inquieto
ante la vida, simpático, extrovertido y alocado en algunas ocasiones, y sobre todo
por ser feliz por como es, y a lo que yo le doy especialmente importancia por
ser sincero.
Por todo esto, debería darle las
gracias a él o a quien corresponda por haberse cruzado en mi camino y hacer que
el final de este año sea mejor de lo que pudiera ser. Así, que solo puedo
decirle eso, gracias; y desearle lo mejor en la vida, que su largo caminar sea
lo mas feliz posible con cada una de las peripecias que se encuentre en él,
porque realmente, se lo merece.
Sin más, solo queda decir, que a
pesar de todo he aprendido mucho este año, he conocido a personas maravillosas
y por ello empiezo a verlo todo de otra manera, se podría decir que el vaso ya
esta medio lleno y no medio vacío.
Feliz
Navidad y Prospero Año Nuevo para todos mis lectores!!
J. Miguel Palma